Draymond Green, alapívot de los Warriors, ni siquiera está en Orlando compitiendo en la reanudación de la temporada NBA. Pero no lo ha necesitado para ser noticia. La NBA le ha impuesto una multa de 50.000 dólares por las declaraciones que hizo mientras ejercía como analista de la TNT, sobre Devin Booker.
«Sacadle de Phoenix», llegó a decir Green, que trató de explicarse. «No es bueno para él ni su carrera. Deben sacar a Booker de Phoenix. Necesito que vaya a otro sitio donde pueda competir todo el tiempo y ganar, porque es ese tipo de jugador«, comentó Green, reconociendo que esas palabras podían ser susceptibles de ser consideradas como ‘tampering’, es decir negociaciones ilegales con jugadores que tienen contrato en vigor, algo prohibido por la NBA.
Booker, gran estrella de Phoenix, está cuajando una excelente temporada, con 26 puntos por encuentro y liderando un inmaculado rendimiento de los Suns en la burbuja, en la que han ganado sus cinco encuentros.
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— Gigantes del Basket (@GIGANTESbasket) August 2, 2020