Ya va algo más de un año desde que Manu Ginóbili dijera adiós al mundo del basket. La leyenda argentina de los San Antonio Spurs, alabado por Kobe y con más de 1.000 partidos disputados en la NBA, cinco anillos y 13,5 puntos de promedio (dos veces All-Star y una vez mejor sexto hombre de la liga) ha concedido una entrevista a ESPN para hacer balance de este tiempo alejado de las canchas.
Y hay una cosa que le encantaría volver a vivir, y otra que para nada siente que necesite tener: «Lo que más echo de menos es el vestuario, mucho, las cenas tras los partidos, la preparación, la sensación de saltar a la cancha y ser un equipo, ser parte de algo más grande que yo. Lo que no echo de menos son esos grandes viajes, los partidos a última hora del día, los back-to-backs, no poder dormir bien, estar cansado o con dolor. Esa parte no la echo de menos en absoluto».