LeBron James visitó la pasada madrugada una de las canchas en las que puede jugar como local el próximo curso: el Staples Center de Los Angeles. La estrella de los Cavs se topó con un gran Julius Randle y cayó derrotado, pero dejó varias acciones de mucho nivel que desataron la admiración entre los aficionados de los Lakers.
Los veranos de agencia libre de James se asemejan al reclutamiento universitario. Una estrella de instituto que se deja querer por varios equipos y termina anunciando su decisión por televisión nacional. Y ayer tuvo una excelente carta de presentación -si es que la necesita-, en el feudo angelino.
LeBron volvió a rozar el triple-doble, y finalizó el duelo con 24 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias. 3 de ellas muy espectaculares: dos sin mirar de bella factura y una con caño a Lonzo Ball. Dale al play y no te pierdas el recital del King en el Staples.
Tras el duelo, LeBron aprovechó además para ‘bendecir’ a los Lakers de Luke Walton, para el que tuvo muy buenas palabras: «Desde que se hizo con el cargo están mejorando cada temporada. Intentan implementar el movimiento de balón que tenían cuando él estaba en Golden State». ¿Un guiño de cara al verano?