En 2002 se estrenaba una película de Michael Lehmann llamada 40 días y 40 noches. En ella, el protagonista de la misma, Josh Hartnett, pasaba un período de abstinencia sexual durante ese tiempo por una promesa. Ese período de ‘sufrimiento’ lo podía haber superado, si fuera en esta época, viendo a los Warriors. Los de Oakland llevan las mismas jornadas ganando en temporada regular, 40, uniendo esta temporada y la pasada, de forma consecutiva. La última, ante los Dallas Mavericks, (127-107).
En la 2015-2016, el ya equipo de Steve Kerr acumula 22 triunfos sin saborear la derrota en el Oracle Arena. Se trata de la segunda racha más larga de la historia, (empatados con los Magic, que lo consiguieron entre 1994 y 1996), y a sólo cuatro triunfos del récord de los Chicago Bulls, que lo consiguieron también entre el 94 y el 96.
En la nueva y clara victoria de los de Oakland, esta vez, el protagonista no fue Stephen Curry. El MVP ‘descansó’ esta jornada con 14 puntos y 9 asistencias. Pero le prestó su legado a unas buenas manos. Las que tiene su socio en los ‘Splash Brothers’ Klay Thompson. El alero sumó unos escandalosos 45 tantos, su máxima anotación del curso, brillando desde el triple, (7/12), pero aportando un 14/20 en total en tiros de campo, ¡y un 10/10 desde el tiro libre! El resto de su exhibición, en este vídeo.
¡Exhibición de Klay Thompson!
Dallas no pudo en ningún momento contener el festival anotador de Golden State. Al final del primer cuarto, ya caían por 10 puntos, (39-29). Apenas 24 minutos, después, el choque estaba decidido, (95-77 al final del tercer cuarto). La baja por descanso de un Nowitzki que dio la victoria la noche anterior quizá pesó demasiado. Sólo Parsons estuvo a la altura, (23 tantos). Salah Mejri, titular, fue un ejemplo de impotencia en los Mavs, (2 tantos, tres rebotes).
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