Como su hermano Pau, Marc Gasol también era duda para jugar el partido. Pero forzaba para ayudar a los Grizzlies y los acababa llevando a la victoria ante los Clippers (115-112). Un triunfo revitalizante y necesario: apenas es el tercero en 22 partidos.
Tyreke Evans era el máximo anotador de los Grizzlies con 30 puntos. Y Marc, a pesar de su dolor en la cadera, se iba hasta los 17 puntos y 15 rebotes, su récord del curso y a un rechace de su mejor marca en la NBA. Dos buenas actuaciones para contrarrestar los 38 puntos que anotaba Austin Rivers para los Clippers.
«Afortunadamente, tenemos un gran equipo médico que me preparó para ayudar a los chicos. Eso es todo lo que quería hacer, sólo ayudar y obtener una victoria», explicaba Marc sobre la importancia de la victoria y sus molestias.
«Necesitábamos esto. Necesitamos victorias, y necesitamos victorias en casa y algo sobre lo que construir. Aunque no he jugado muy bien, ha valido la pena porque hemos ganado», concluía el itnernacional español.
MAAARC GASOL
17 puntos, 15 rebotes, 4 asistencias
¡Victoria! pic.twitter.com/QV7VKmdvQM
— NBA Spain (@NBAspain) 24 de diciembre de 2017
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