Después de 23 partidos ausente, Nikola Mirotic ya está preparado para reaparecer con los Chicago Bulls. Este viernes, en Charlotte, jugará su primer partido una vez recuperado de las fracturas que le provocó un puñetazo de su compañero Bobby Portis. Y vuelve sin rencores.
«No estoy enfadado con nadie. Estoy bien conmigo mismo. Mi familia es genial. No hay nada por lo que estar enfadado ahora. Se acabó. Es un nuevo comienzo», ha declarado Mirotic en declaraciones recogidas por el Chicago Tribune.
«Me siento mucho mejor. Cada día hago trabajo extra. Me siento mejor de las piernas. Mi forma física también es mejor. Estamos cerca», ha añadido Mirotic, que se ha quedado practicando lanzamientos después de los entrenamientos del equipo.
Getting some extra work in after a good practice in Indy. pic.twitter.com/Qkj7EGj7Pm
— Nikola Mirotic (@threekola) 6 de desembre de 2017
«Estoy emocionado. Trabajé mucho durante el verano sin jugar con la selección. Y ya ha pasado mucho tiempo desde que jugué el último partido. Jugué en pretemporada pero no es la misma competición. No será fácil al principio, pero voy a dar lo mejor de mi y seguro que mis compañeros me apoyarán, y espero que los aficionados también», concluye Mirotic.
Su entrenador, Fred Hoiberg, destaca la actitud con la que ha vuelto el internacional español: «Todo de lo que habla es del equipo. Quería estar con ellos entrenando, en el banquillo apoyando. Y una vez está preparado para volver a jugar, ha hablado de hacer lo que sea para que tiremos adelante y el equipo gane».
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