El regreso de Nikola Mirotic a las pistas NBA está más cerca. Pese a que todavía tiene molestias, el internacional español ha superado casi al completo las fracturas provocadas por el puñetazo de Bobby Portis en la pretemporada de los Bulls. Aunque todavía no se habla con su agresor, ya se ejercita con el resto de sus compañeros.
El ala-pívot volvía a los entrenamientos esta semana, y la pasada madrugaba se sentaba por primera vez en el banquillo de Chicago durante un encuentro de esta campaña. Aunque todavía lo hacía con ropa de calle, Mirotic presenciaba en directo la derrota de los de Hoiberg ante los Suns (99 a 104).
Inicialmente existía la posibilidad de que el español fuera parte de la expedición a Denver para el encuentro ante los Nuggets del jueves, cuenta Chicago Tribune. Pero finalmente tanto él como Zach LaVine se quedarán en Chicago y entrenarán durante la ausencia de sus compañeros con el vinculado de la Liga de Desarrollo.
«No tenemos mucho tiempo para entrenar con todos los partidos, así que intentaremos utilizar esta situación tanto como sea posible. Podrán realizar entrenamientos de gran calidad», afirmaba Fred Hoiberg.
El español debe ultimar su puesta a punto, porque su regreso es inminente. Aunque Hoiberg confirmaba que tenía alguna molestia tras su primer entrenamiento desde el 17 de octubre, podría volver a disputar minutos a finales de esta semana o inicios de la próxima.
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