No fue un partido más el que se jugó esta pasada madrugada en el San Antonio Spurs–Minnesota Timberwolves. Al menos viendo todo lo que sucedió. La conclusión, no obstante, la de siempre. Victoria de los tejanos por 101-95. Los cinco veces campeones NBA firman un arranque de 18 victorias seguidas en casa, que suman 27 si se unen a la pasada temporada.
Para comenzar, Duncan no se vistió debido a unos problemas de rodilla. ¿Quién le iba a sustituir? Un héroe inesperado. Boban Marjanovic llegaba a San Antonio como proyecto de futuro y está convirtiéndose en un trabajo de presente. Sus 17 puntos, y un perfecto 7/7 en tiros de campo, fue el acicate interior que necesitaron en momento clave los jugadores de Greg Popovich. O mejor dicho, de Ettore Messina.
Porque el entrenador local perdió la cabeza en el segundo cuarto. Tras no señalar los colegiados una falta a Aldridge, entró en el campo protestando. Forzó dos técnicas seguidas, dejando la dirección del choque al italiano tras ser expulsado. Una acción que encendió a los suyos. Como prueba de ello, el violento ‘facial’ que le hizo David West al ‘lobo’ Adreian Payne. Para no perdérselo.
¡Mira que mate del ex de los Pacers David West!
En los Wolves, Wiggins aportó 18 puntos, y se benefició del mejor pasado de la jornada NBA. Ricky Rubio dio 14 insuficientes asistencias para conseguir la victoria. El dato curioso ocurrió fuera del partido. Los Spurs tuvieron que recurrir a Batman para atrapar a un murciélago. La segunda ocasión que invade su pabellón. De momento, hubo final feliz. Con esta racha en casa, nadie quiere perderse a los tejanos.
