Su escalofriante lesión con USA Basketball dio la vuelta al mundo. Era un 2 de agosto de 2014 y Paul George se fracturaba la tibia y el peroné en el primer amistoso con la Selección de Estados Unidos perdiéndose la Copa del Mundo de España.
Ahora, casi dos años después, ha demostrado que la lesión es historia y está en plena forma. El alero de los Pacers ha brillado en la primera ronda de playoff: 27,3 puntos, 7,6 rebotes y 4,3 asistencias.
En el séptimo y definitivo choque, 26 puntos, 12 rebotes y 3 recuperaciones descansando sólo 2 minutos de los 48 totales del partido.
El entrenador de los Raptors, Dwane Casey, reconocía su labor: “Te lo digo, me recuerda al joven Kobe Bryant en los días de los Lakers, como si estuviera en Seattle. Está de vuelta y estoy feliz por él. Ahora que hemos terminado con él, estoy feliz por él porque es muy joven. Él representa todo lo que el baloncesto debe ser y está en forma como un All-Star”.
Su técnico, Frank Vogel coincidía en que el retorno de George es “un triunfo notable y un rendimiento notable. Para él para volver a la cancha esta temporada y jugar como lo hizo en los playoffs fue más que notable”.
“Si me hubieran dicho que tendría la oportunidad de dirigir a mi equipo el primer año de vuelta, tener la oportunidad de avanzar a la segunda ronda, llevar a los playoffs de nuevo a Indiana después de no estar la temporada pasada. Y luego tener cinco defensores distintos, tener que encontrar la manera de anotar… si me hubieran dicho que iba a hacer todo esta temporada y estar sano, probablemente me habría reído. Ha sido un largo viaje. estoy muy orgulloso, muy orgulloso de mis chicos. Ha sido una buena temporada para nosotros”, dice George que se ha despedido de la temporada NBA con este matazo con 360º:
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