Al final de la temporada pasada empezamos a ver un Ricky Rubio diferente: a su ya habitual barba le empezó a acompañar un pelo largo que dejó crecer aún más durante el verano, cuando el base internacional español se machacó para muscular su cuerpo. Todo ello ha derivado en una transformación que comenta el base de los Utah Jazz en una entrevista más personal para la revista GQ:
(Pelo largo) «La temporada pasada pasé por muchas cosas y decidí dejarme el pelo largo en verano. Me sentía bien, me veía bien. Y jugaba mejor».
(Reacción en sus compañeros de Selección) «Se burlaron de mi pelo largo, pero creo que era porque estaba celosos. Creo que se reían para no demostrar que estaban celosos».
(La barba) «Me sentí bien, vi que tenía una imagen más dura. Me hizo jugar más agresivo, lo que quería. Sigo siendo la misma persona, pero la barba me hace parecer más duro. Empezó con mi apariencia y se trasladó a la pista».
(La barba de Harden) «Para mi gusto, la suya es demasiado larga, pero le queda bien. Si te dejas crecer la barba así, a veces es difícil de mantener».
(Cómo cuida la barba) «Uso un poco de loción y me pongo un poco de acondicionador en la ducha. Intenté no dejar que se vuelva demasiado loca porque los pelos crecen en varias direcciones».
(Qué hace con el polo) «Me hago un moño porque es más fácil. En los partidos me gusta ponerme gel y echármelo para atrás para que no me moleste. Pero no mucho. Mucho gel no es divertido».
(El dilema del moño) «Hice una encuesta en Instagram: moño sí o moño no, y ganó el no. Intento seguir lo que la gente quiero. Pero a veces salgo del carril y vuelvo al moño».
(Inspiración para sus looks) «Uso mucho Pinterest para seguir tendencias. Entre y miro a tíos con moños y barbas ahora que yo también llevo. Si veo algo que me gusta, lo intento copiar».
