No les ha sentado nada bien a los Timberwolves el parón del All-Star: llegaron a él ganando tres de sus últimos cuatro partidos y han vuelto con dos derrotas seguidas.
La segunda, ante unos New York Knicks muy necesitados: ganando 95-103 han roto una racha de 7 derrotas seguidas.
Carmelo Anthony lideró a los Knicks con 30 puntos, 10 de ellos en el último cuarto, y alcanza ya los 22.000 en su carrera. Algo que sólo han conseguido 30 jugadores en la historia de la NBA.
«Voy a hacer todo lo posible para ganar partidos», destaca Melo, que jugó 41 minutos ante los Wolves, un día después de disputar 37 frente a los Nets.
Su mejor escudero fue Robin Lopez, con 26 puntos y 16 rebotes. Porzingis, en cambio, se quedó en 6 tantos y sólo 12 minutos y por problemas de faltas. Y Calderón anotó 9 puntos.
Mejor partido tuvo Ricky Rubio, también autor de 9 tantos, a los añadió 16 asistencias. El base español fue el catalizador del juego del equipo, surtiendo de balón a Towns y Wiggins, que metieron 24 puntos cada uno.
Pero los Wolves no pudieron hacer nada ante la superioridad de los Knicks, sobre todo en el rebote: 51 a 31 a favor de los neoyorkinos.
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