Los Pistons son, un año más, una caja de sorpresas: Blake Griffin no enlaza muchos partidos seguidos, Derrick Rose destaca pero no es titular, Andre Drummond se marchará más pronto que tarde… El equipo de la MoTown no está entre los mejores de la Conferencia Este una vez más y pocas esperanzas albergan sus sufridos seguidores, pero siempre hay algo por lo que alegrarse. En este caso, la mejora repentina por exposición que ha sufrido su elección del último draft: Sekou Doumbouya.
Le ha costado arrancar, pero ha encontrado un hueco en la rotación de Dwane Casey y empieza a hacerlo bien. Los problemas físicos de Griffin le han llevado, incluso, a la titularidad. Hasta la pasada noche, en la que brilló en Cleveland con 15 puntos y un matazo sobre Tristan Thompson, llevaba 10 partidos jugados -de 37 posibles- en los que salía a 4,6 puntos y 3 rebotes de promedio. Su inicio de 2020 es lo verdaderamente reseñable: sale a una media de 13 puntos -tras cuatro noches- en el nuevo año.
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— NBA (@NBA) January 8, 2020
Hasta tomar la alternativa en esta última fase Sekou Doumbouya ha estado más con el afiliado de la G-League, Grand Rapids Drive, que con el equipo principal, Detroit Pistons. En la liga de desarrollo tiene unas medias más acordes a un pick 15 del draft: 16,7 puntos y 5,2 rebotes. Ahora le tocan los escenarios importantes…
¿De dónde viene Sekou Doumbouya?
Este jugador es uno de los jugadores europeos con más proyección de su generación. Acaba de cumplir 19 años y tiene nacionalidad francesa pese a que nació en Guinea-Conakri (de hecho, es el primer drafteado de la NBA nacido en ese país). Hablamos de un alero que, de momento, está en 2,03 metros a falta de ver si crece un poco más. Destaca por su físico y habilidades para mantener un ritmo alto durante los partidos, pero queda un poco olvidado su tiro y no debería ser así: en la G-League está en un 38% en triples con 5 intentos por encuentro.
Doumbouya procede del Limoges francés. La pasada campaña, en la que brilló lo suficiente como para que la NBA se fijara en él, alternó la ProA con la EuroCup. Al Limoges había llegado gracias a lo que hizo en la ProB con el Poitiers, el equipo en el que comenzó a jugar como profesional: allí fue el Jugador Joven de la 2017/18.
Doumbouya empezó jugando al fútbol con sus hermanos y se pasó al baloncesto a los 12. Desde ese momento, crecimiento rápido y amor por la pelota naranja.
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