Minnesota Lynx ha dado un golpe encima de la mesa en la final de la WNBA anotando una canasta de las que duelen.
“1,7 segundos son mucho tiempo”, decía una sonriente Maya Moore después de meter el triple ganador para su equipo en la pista de indiana Fever y adelantar a las Lynx en la final (1-2).
Saque de banda en pista delantera. La defensora de More cae en la primera finta para recibir. Una vez con el balón en las manos finta el tiro, se abre a la derecha y para lanzar un triplazo increíble y poner el 77-80. Increíble.
El partido había sido un toma y daca de los dos equipos ante 16.332 espectadores, entrándose en el último minuto con empate a 77 tras un triple de Montgomery.
Moore acababa el choque con 24 puntos, 7 rebotes y 2 recuperaciones, la más destacada junto a Sylvia Fowles (13 puntos) y Seimone Augustus (11+11). Desde el banquillo ha vuelto a brillar nuestra representante, la internacional Anna Cruz que se ha ido hasta los 10 tantos, 5 asistencias y 2 robos en 31 minutos de juego.
Las Lynx tendrán la oportunidad de sentenciar el domingo en el cuarto partido de la final pero como dice Maya Moore, cauta, “son unas series largas. Nadie ha ganado nada todavía”. Palabras de MVP.