AMERICAN LEGENDS DOMINO´S BY AJEROEstás viendo//Los profetas de la rabia, por José Ajero
Los profetas de la rabia, por José Ajero

Los profetas de la rabia, por José Ajero

Llegan las últimas horas de LeBron James en los Cavaliers. ¡Será esta temporada o será para siempre?

Hay cierto gusto en la derrota. Más en la ajena, claro. Pero la más dura es la indiferente. La que te toca de medio lado y te hace cosquillas. Esto es. Con los Cavaliers por los suelos, es la hora de matar a LeBron James.

Junio es de Michael Jordan. Esto supone que cada final que James se deja en el camino, les vale a todos los que no quieren comparar para hacerlo. Ahora se irá de Cleveland, a buscar un anillo con un equipo que gane… Él solo no ha podido. No importa que haya tomado la liga por asalto, que haya mejorado cuando esperábamos el bajón: volvió a perder y eso hay que hacerlo saber.

En la victoria también hay amargura. Dice LeBron que KD es uno de los mayores talentos que ha habido en la NBA. Dice que es el mejor contra el que ha jugado. Le atribuye el mérito de su frustración, porque sin él sus Cavs supieron ganar a Warriors. Mientras celebramos la rutina de los campeones, James nos dice que estamos equivocados.

El famoso lazo de tres puntos que KD pone hace un par de noches y el que puso hace 365 días solo son iguales en nuestra cabeza de buscar noticia. No hay repetición, dice LeBron, solo excelencia. Una sublime ejecución que ha sido acogida por los profetas de las nubes negras como un cobarde que no supo ganar solo, que se unió a caballo ganado pese a que los resultados dicen que él lo hizo intocable.

En fin, el proseletismo de la rabia va por barrios y no hay quien lo pare. Dicho esto, pensemos que hay un cuarto partido que parece de trámite. Warriors lo querrá ganar y celebrar en esos vestuarios que Steph Curry dijo que olían a champán. Cavs no está por la labor y que el año pasado ya atrasaron las celebraciones, con veintipico triples y 40 puntos de Kyrie Irving.

Tampoco importa mucho, más allá del impacto visual en la despedida de LeBron. Y de la pelea por el MVP del campeón, Curry o KD. Con el anillo en el bolso, espera un nuevo día independientemente de la victoria de uno u otro. Es el último partido de LBJ en Cleveland, ya veremos si de la temporada o de su vida. La decisión que tome será castigada si tan siquiera estar tomada.

Deliza hacia abajoSigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
Desliza hacia abajoSigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
Cargando el siguiente contenidoEspera un momento por favor :)