Cualquier amante del deporte, especialmente si es seguidor del baloncesto, está al día de lo que ocurre en la NBA. Se trata, sin duda, de la principal competición de esta disciplina a nivel mundial; cada encuentro es un espectáculo sin igual y, por eso mismo, tanto las casas de apuestas como los aficionados no dejan de prestar atención a cualquier acontecimiento que tenga lugar. Sí, son muchos los seguidores que no se conforman con tener un papel meramente pasivo y deciden añadir emoción al torneo apostando por sus equipos favoritos. No obstante, también es importante estar al día acerca de los tipos de apuestas de basquetbol que existen. Y ese es el motivo que nos lleva, a continuación, a ver las opciones que la NBA ofrece a sus seguidores más fanáticos.
Las apuestas más habituales a corto plazo
Que los encuentros de la NBA despierten tanto interés es algo que no debe sorprendernos. Se trata, a fin de cuentas, de un torneo con una larga historia y que, a lo largo de las últimas décadas, ha acogido a algunos de los nombres más importantes del baloncesto, tanto estadounidenses como de otros países. Jugadores españoles, como Ricky Rubio o Pau Gasol, también han destacado en dicha liga.
A la hora de apostar en la NBA, pues, encontraremos diversos mercados, de modo que el margen de maniobra es amplio y variado. Sí, podremos apostar al ganador del partido, una de las opciones más habituales. Los resultados posibles son pocos, ya que no existe la opción de empate, pero las cuotas suelen ser más bajas. No obstante, también podemos apostar por hándicaps. Eso significa tener en cuenta la diferencia de puntos que se producirá, al final del encuentro, entre ambos equipos. Además, podemos apostar por hándicaps en cada cuarto o en cada tiempo del partido.
Otra modalidad muy aceptada entre los seguidores es la de apostar por los puntos totales que obtendrá un equipo. Asimismo, es posible jugar por los puntos obtenidos por los dos equipos. En este tipo de apuestas, por supuesto, la información será clave. Es muy útil saber que la media de puntos suele estar comprendida entre 190 y 220, pero también hay que prestar atención a las estadísticas de la temporada para hacernos una idea de la tendencia de los equipos.
Jugar a largo plazo, otra forma de apostar
Las apuestas pueden hacerse sobre los partidos que se jueguen en ese momento, pero la NBA también dispone de mercados más variados y que tienen en cuenta resultados a largo plazo. Estos resultan atractivos porque, además de aportar variedad a la forma de jugar, pueden brindar beneficios interesantes. Eso sí, tendremos que armarnos de paciencia para saber si hemos elegido bien.
Un claro ejemplo de esto es apostar al campeón de la competición. Recordemos que hay un total de 30 equipos, de modo que es fácil calcular las probabilidades de que uno de ellos se corone con el título. Eso sí, hay que tener en cuenta que, al tener toda la temporada y los playoffs por delante, hay mucho margen para las sorpresas. Cambios en la plantilla, lesiones y malas rachas pueden girar la competición en cualquier momento.
En lugar de apostar al campeón definitivo, también podemos optar por hacerlo por los campeones de las conferencias y de las divisiones. La NBA está dividida en dos conferencias, la este y la oeste, y dispone de seis divisiones diferentes: la atlántica, la central, la pacífica, la sudoeste, la sudeste y la noroeste. Así, la variedad de opciones se multiplica.
Por último, no solo podemos apostar por equipos. Al fin y al cabo, cuando termina la temporada, la competición suele otorgar algunos premios destacables a determinados jugadores, como son el MVP (el mejor jugador) o el mejor rookie del año. Apostar por quiénes serán los condecorados también es posible y, aunque aquí habrá muchos más candidatos, un completo seguimiento de la competición puede ayudarnos a hacernos una idea acerca de quién tiene más probabilidades de ser elegido.
