No estará muy contento Rick Carlisle con la manera de ejecutar la pizarra defensiva de sus Dallas Mavericks la pasada madrugada. En dos ocasiones tuvieron que defenderse los Mavs de acciones decisivas. En las dos salieron perdedores. Utah Jazz asaltó, con su séptima victoria consecutiva, el American Airlines Center, para llevarse el triunfo en la prórroga por 119-121.
En un partido entre dos rivales directos, (ahora, los Jazz marchan con 26-25, y los de Texas, 29-26), en lucha por la octava plaza del Oeste, la emoción estuvo siempre presente. A excepción de un buen comienzo de los locales, (29-21), nadie se marchó en el marcador. Así, se llegó a un final igualado, con Dallas tres puntos por delante, (110-107), en los últimos 10 segundos. No contaban con un tiro casi imposible. Rodney Hood y su talentosa zurda, (29 puntos), enviaron el partido a la prórroga.
¡Triple que vale una prórroga de Rodney Hood!
El panorama no cambió en los cinco minutos extra. De hecho, en los últimos 120 segundos, nadie había conseguido anotar, hasta que la última acción fue a parar a manos de Utah Jazz. Y ahí Quin Snyder lo tenía muy claro: le entregaría la última bola a su jugador franquicia. A pesar de llevar un 7/19 en ese momento, Gordon Hayward no falló. Se quedó tras un cambio con Zaza Pachulia, y su 1 contra 1 finalizó con un lanzamiento hacia atrás totalmente liberado. La consecuencia, victoria para los de Salt Lake City.
¡Lanzamiento ganador de Gordon Hayward!
El último choque de Dallas Mavericks antes del All-Star no cambió su inercia negativa. Acumulan cuatro derrotas en los últimos cinco partidos. A pesar de presenciar otro gran partido de Chandler Parsons, (24 tantos), y con una gran aportación de los bases, (Deron Williams, 23 puntos, y Raymond Felton, 17), no supieron parar en la pintura a Utah. Derrick Favors sumó un 16+8, y Gobert 14+10, para contener a su equipo hasta que aparecieran las estrellas exteriores. El resultado ya es conocido.
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