Cualquier nostálgico de aquellos Chicago Bulls de los años 90 se acuerda de la zurda prodigiosa del croata Toni Kukoc. Tres veces campeón de la NBA (1996,1997,1998), dos platas olímpicas (1988, 1992), un oro mundial (1990) y dos oros europeos (1989, 1991).
16 años. Ese es el tiempo que ha tenido que pasar para que la ciudad de Illinois tenga de nuevo a la pantera rosa Kukoc entre sus muros. Vuelve tras haber pasado por los 76ers, Hawks y Bucks como jugador y nueve años después de su retirada como jugador NBA.
Entra de nuevo a la familia de los Bulls como nuevo consejero del presidente y embajador del equipo. Fue uno de los promotores de la ola de talento internacional que ha continuado llegando desde Europa cada temporada y que tantos éxitos ha dado a al mejor liga del mundo.
«Toni trabajará en muchas áreas de nuestra organización. Aportará una valiosa perspectiva y experiencia en diferentes frentes, ya sea en las relaciones con los jugadores internacionales o compartir lo que significa ser un miembro de los Bulls, en encuentros con aficionados y empresas que nos apoyan. Toni será un destacado representante de la historia de esta franquicia y también de su futuro», decía el presidente de la franquicia en el comunicado que presentaba a su nuevo hombre de confianza.
Kukoc y los Bulls, segunda parte…
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