Este jueves dará comienzo el Eurobasket Femenino 2019, con España como una de las favoritas para hacerse con el trono continental. Kiko Martín charló con Marta Xargay en la revista del mes de junio, correspondiente al número 1.485. Además de esta entrevista premium, puedes encontrar todos los contenidos de esa Gigantes AQUÍ.
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Polivalente, trabajadora y generosa en el esfuerzo con su capacidad para asumir distintos roles en función del bien del colectivo. Si alguien encarna el ‘yo al servicio del nosotras’ que pontifica el seleccionador Mondelo como lema de cabecera, ésa es Marta Xargay. Desde su eterna discreción, perfecta representante de la alta burguesía del baloncesto español.
Gigantes: Prometo no hablar más de las que no están pero la primera pregunta es obligada ¿toca dar un paso al frente ante las ausencias de Sancho Lyttle y Alba Torrens?
Marta Xargay: Por supuesto. En la Selección quedamos un grupo de 6 o 7 jugadoras que somos una base sólida. Nos conocemos muy bien. Jugamos de memoria y eso debe ayudarnos. Pero sí, toca dar un paso al frente. Dicho esto, creo que la ausencia de Sancho después de dos campeonatos está ya amortizada con la adaptación de Astou. No son comparables porque poseen características diferentes, pero creo que el equipo ya se ha adaptado a ella. El caso de Alba es más shock, pero un shock progresivo porque el año pasado ya la tuvimos con cuentagotas porque estaba tocada y en varios momentos tuvimos que adelantar ese paso al frente del que hablábamos.
G: ¿Enterramos ya lo del ‘grupo plácido’ para España en este EuroBasket?
M.X.: Desde luego. Jugamos contra la anfitriona, contra una Gran Bretaña reforzada con una grandísima jugadora y contra Ucrania, que tradicionalmente es nuestra bestia negra. Mira lo que sufrimos para ganarles la última vez. Iagoupova es la estrella, pero además son un equipo que se nos da fatal.
G: ¿Es el EuroBasket más duro de los últimos años?
M.X.: Sí. Realmente desde el nuestro de Francia’13, el nivel no ha dejado de subir. Y sigue subiendo. Este año, además de muchas jugadoras nacionalizadas, tenemos a Rusia, que vuelve con ganas de recuperar el terreno perdido, y seis billetes en juego para el Preolímpico.
G: Además de España ¿cuáles serán los otros cinco?
M.X.: Mira, eso te lo firmo ahora mismo. Apunta Serbia, Bélgica y Rusia -aunque vienen del mismo grupo y uno de ellos puede quedarse fuera- Francia, Italia… luego siempre hay alguna sorpresa. Así que va a estar muy complicado.
G: ¿Eso pone el listón de objetivos más bajo que en ocasiones precedentes? Me refiero que no colgarse una medalla tampoco sería un desastre…
M.X.: Nosotras siempre vamos partido a partido. Es una máxima como grupo. Pero no te voy a engañar. Yo quiero ganar el EuroBasket. Todas venimos aquí para estar en la final como mínimo. Luego ya se verá.
G: A nivel personal ¿con qué sensaciones llega este EuroBasket?
M.X.: Pues ya me gustaría que las sensaciones fueran mejores. La temporada no ha salido como esperaba. Pero creo que eso me motiva aún más para trabajar duro y acabar con buen sabor de boca. Para mi es una motivación extra y llego muy mentalizada para dejarme el alma en cada entrenamiento.
G: Eso le honra una vez más. Además como multiusos del equipo siempre será más fácil encontrar una posición en la que sentirse más cómoda ¿no?
M.X.: Sí (risas). A mí me da un poco igual jugar más por fuera o pisar algo la pintura. Todo lo que sea ayudar al equipo y pasármelo bien será bienvenido. Quiero disfrutar en la cancha.
G: Mójese. Sabemos que tenía el corazón dividido en la final de la Liga Femenina. ¿Quién quería que ganara: su exequipo o el club de su ciudad?
M.X.: El entrenador de Girona es mi cuñado. Creo que la incógnita está despejada (risas). En serio, he vivido la temporada muy de cerca y lo que han hecho ha sido impresionante, sobre todo después de la lesión de Nadia Colhado. Siempre le deseo lo mejor a Avenida, pero en esta ocasión la familia tiraba mucho.
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