Estamos en las semifinales, 13 años después, con más o menos barbas; más culo y menos muñeca. La vida no pasa para todos igual, pero sí para nuestra selección. Generadores de metal, son capaces de crear emoción; de que nos abracemos a los compañeros de trabajo y de que llamemos para intercambiar sonidos guturales con los seres queridos.
Sólo nos sale cantar, sin saber muy bien qué decir. Instintos primarios. Joder, mola. Mola rebajarnos a nuestra más mínima expresión y con un poco de chulería, mirar al señor-señora que no sabe de qué color un balón de basket, pero hoy se ha fumado la mañana deseando tres prórrogas. Estamos en la final. Nos queda una más, pero las finales son en domingo y las compañías ya las elegimos.
Sexo telefónico…
…O eso creo. La segunda mitad y las dos prórrogas, a horas de oficinas chungas, han sido un intercambio de sonidos guturales en textos, audios y llamadas rápidas. Alguna -conversación- he tenido en el baño, tras fallar un libre Patty Mills. Luego, con los libres de Marc Gasol o los triples de Sergio Llull no me llegó la sangre al cerebro y como estoy en la redacción de Movistar solo me salía un corporativo ¡Vamos!
Andando
Son días complicados en los que hay que explicar a mucha gente que no está acostumbrada al basket que es lo que pasa en un partido. No todo es meter un gol. E incluso explicar que hay jugadores en este deporte que pueden ser determinantes andando. Como lo es Marc Gasol, en jugador alto, grande, conocedor de sus limitaciones físicas y que decide no ser un ‘molón de poses defensivas’. Domina con el choque, baja poco el culo y ordena con los brazos. Hoy si queréis hablamos de canastas y de tiros libres.
Mandarinas y limones
No es los que haya metido Llull o los que haya fallado. No es esa mierda hoy. Bueno, ni hace una semana. Es asumir los tiros que más pesan. Llull se ha hecho un Navarro. No una Bomba. No, un Navarro. Asumir los tiros que más cuestan que pese a la creencia, no son los de encima de la bocina. No. Son los que evitan que un rival amplíe su ventaja y su conciencia de victoria. Por eso, hasta me parecen anecdóticos los dos triples de la última prórroga. Eso fue lo esperado.
Role Player
Hay leyendas en las sesiones de entreno del Real Madrid que hablan de cabreos de Rudy Fernandez que acaban en exhibiciones. Llevarle al límite es exponerle a su mejor cara. Hoy ha jugado 38 minutos, sólo superado por Marc y al lado de Víctor Claver. Ha defendido al más caliente en cada momento. Y le ha dado tiempo a meter tres o cuarto manos clave que han reventado nuestra hora del café. Del lomo de Claver y claro, de Rodolfo han salido los 33 de Marc, los 19 de Ricky y los 17 de Llull.
Sergio Scariolo
Ha habido momentos de partido en los que Joe English era una fregona. Supuraba agua por todos sus poros, la cara no era buena: cansancio. Nosotros que jugamos la primera fase andando, hemos llegado con más piernas y menos muñecas, pero qué importante han sido. Australia, que es un ejemplo de preparación física digno de estudio en la NBA, no ha podido con un equipo que fue lento hace 15 días y un cohete de concentración y esfuerzo a la hora de la verdad.
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Hoy no importa
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