El desembarco de la NBA a nivel internacional fue a lo grande. El Dream Team, un equipazo con las grandes estrellas del momento, liderados por un trío inigualable: Jordan, Magic y Bird. El mejor equipo de la historia, a través de diez intrahistorias.
1.- De números y ovaciones. En el departamento de marketing de la USA Basketball, lo tenían todo más que preparado. Hasta el punto que preguntaron cuál era el último dorsal en la numeración del baloncesto FIBA. “Son del 4 al 15. Por lo tanto, el 15”. Y ese fue el número elegido para Earvin “Magic” Johnson, con la intención que fuese el último en cada una de las presentaciones de los partidos y se llevase la ovación más prolongada.
2.- Polémica en la lista de jugadores. Cuando Chuck Daly fue designado el entrenador del combinado estadounidense que jugaría los Juegos Olímpicos de Barcelona, hizo una lista con una preselección inicial. En ella, en un principio, no estaban ni Charles Barkley ni Larry Bird. La mayor sorpresa era la inclusión de Scottie Pippen, junto a otros seis fijos: Ewing, Magic, Karl Malone, Jordan, Mullin y David Robinson. Del resto de nombres para incluir o descartar finalmente, estaban como posibles, Joe Dumars y Dennis Rodman. Pero nunca Isiah Thomas, lo que creó gran controversia. Thomas se tomó tan mal su no inclusión en el Dream Team que, entre sus pataletas, criticó a su entrenador en Detroit Pistons públicamente durante aquella temporada 91/92, acusándolo de estar más pendiente de la selección USA que de la campaña con su equipo.
3.- El día después con los NCAA guys. Famoso fue que en la primera concentración, al Dream Team lo pusiera a prueba un combinado de universitarios de élite, con los que se enfrentarían. Tras dos días entrenando juntos, se organizó un partido a 20 minutos, les derrotaron (62-54) a puerta cerrada. Antes que pudiera entrar la prensa, ya se encargaron de situar el electrónico en 0-0. Claro, todo esto fue sin Michael Jordan, que no pudo entrenar aquella jornada. Al día siguiente sí jugó y empezaron con un parcial de 19-0. Como confesó el entrenador asistente Lenny Wilkens “esa fue la primera muestra real del Dream Team. A mitad del partido, no podían ni tan siquiera pasar el balón desde medio campo”.
4.- La hilarante sesión de fotos. En el verano de 1992 todos los medios del planeta se hicieron eco de la venida de los Juegos Olímpicos de Barcelona y con ellos, el principal reclamo, el Dream Team. La prestigiosa publicación “Newsweek” había programado una sesión de fotos durante la concentración californiana de los jugadores, con Magic Johnson y Michael Jordan. Y para salir en portada, a Magic le pareció una inconcebible irrespetuosidad el hecho que, junto a ellos dos, no estuviese Larry Bird. O los tres o ninguno. A regañadientes, los editores y fotógrafos presentes de la revista, accedieron. Y a modo de venganza por tal “olvido”, entre los tres se dedicaron a bromear y entre carcajadas, forzar a parar continuamente, hasta desesperar al fotógrafo. Una rutinaria sesión, acabó eternizándose.
5.- La devoción del resto. Durante la semifinal olímpica, vimos asombrados cómo el jugador lituano, Arturas Karnisovas, hacía fotografías con una cámara pequeña de fotos a los rivales estadounidenses de pie, delante de su banquillo, durante el propio partido. La devoción de los adversarios cada vez que se enfrentaban al Dream Team era enorme. Durante el Preolímpico de Portland, el veterano base argentino Marcelo Milanesio, subiendo el balón defendido por Magic Johnson, se iba acercando a la banda donde estaba su banquillo y mirándoles unos instantes, posó para una fotografía que pidió a los compañeros que se la hicieran. Reconoció “estar abrumado”. Pero la más curiosa fue la del mítico alero brasileño Oscar Schmidt, que buscaba a su ídolo. “Para mí, Jordan es el mejor, pero mi ídolo es Larry Bird”. De tal búsqueda se enteró Bob Ryan, afamado periodista del Boston Globe y autor de la biografía autorizada del propio Bird, “Drive”, que sacando uno de sus ejemplares, le pidió a Larry que se lo dedicara a Oscar. Al entregarle el libro, Oscar emocionado leyó la dedicatoria, “Te quiero en un ‘uno contra uno’ en French Lick”. Y sin saber que French Lick era su población natal, lo tradujo de forma literal como ‘lametón francés’. “¿Y esto? ¿Qué significa?”.
6.- A la búsqueda del asesor particular. En el partido amistoso que el Dream Team disputó en Montecarlo ante la selección francesa, el príncipe Alberto, devoto absoluto del baloncesto NBA, disfrutó como un niño y le iba explicando a su padre, el monarca Raniero de Mónaco, todos y cada uno de los aspectos del juego. Raniero, desconocedor del mundo del baloncesto hasta un punto que sonrojaría, consciente de su poder otorgado en el Principado de Mónaco, pidió que ese señor de la banda (el entrenador Chuck Daly), subiera al palco para que le fuera asesorando de lo que estaba viendo en pista. Fue su hijo Alberto quien tuvo que aclararle que la labor desempeñada por ese señor de pie en la banda, también era importante.
7.- Las salidas de los jugadores. No hablamos de Montecarlo, donde su estancia fue exótica en todos los aspectos. Ya en Barcelona, el Dream Team, que estaba hospedado en el hotel Ambassador, que era como una fortaleza en la que solo podían entrar ellos y no podían salir sin permisos, se comportaron como jóvenes estudiantes en sus residencias e hicieron todo lo posible para evadirse del hotel y respirar el ambiente por las calles. Karl Malone, seguidor de un joven Oscar de la Hoya, fue hasta el viejo Ausias March en Badalona y se sentó junto a su familia para verlo combatir, creándose un amistoso vínculo entre ellos. Barkley prefería una terraza y una buena botella de vino por Las Ramblas, aunque los aficionados le agasajaran. La más curiosa historia la protagonizó Larry Bird, un enamorado del béisbol, que de sus escasísimas salidas de la habitación, trató de ir a ver a sus compatriotas en un encuentro en el estadio Feixa Llarga, en L’Hospitalet. Y se le ocurrió tomar el metro. Y como no podía ser de otra forma, empezó a dar vueltas y se perdió. Unos compatriotas que hacían turismo por la ciudad, no daban crédito cuando lo vieron en una de las estaciones, se interesaron por él y le llevaron al recinto.
Mit Michael «Magic» Johnson (r) und Charles Barkley (2.v.r.) an der Spitze ziehen die Mitglieder des legendären US-amerikanischen «Dream Teams» am 08.08.1992 bei den Olympischen Sommerspielen von Barcelona bei der Basketball-Siegerehrung jubelnd durch das Stadion. Die Amerikaner hatten zuvor das Spiel gegen Kroatien mit 117 : 85 klar und eindeutig für sich entschieden und sich damit die Goldmedaille geholt. (Photo by Kai-Uwe Wärner/picture alliance via Getty Images)
8.- El arrepentimiento de Barkley. La imagen era muy importante en el Dream Team de cara al resto del mundo. Por eso, cuando en el debut frente a Angola, Charles Barkley bajando a defender, soltó un codazo al liviano alero angoleño Herlander Coimbra, en una de sus típicas cruzadas de cable, se ganó no solo los furiosos pitos del público, sino también el tirón de orejas de sus compañeros. La paradoja quiso que el tal Coimbra, joven estudiante de matemáticas, tenía como ídolo al propio Barkley. Este fue a buscarlo al vestuario para hacerse una foto con él a modo de disculpa tras el choque. Y no fue el único gesto. El día de la final, regaló a Dino Radja su propia sudadera, cuando estaba terminantemente prohibido regalar ninguna prenda del material deportivo.
9.- Un gesto de reconocimiento. Mucho se habló de la primera vez que Toni Kukoc se enfrentó al Dream Team, en el USA-Croacia de la fase previa en los Juegos. Tanto Jordan como Pippen lo asfixiaron hasta casi humillarlo. Kukoc, 4 puntos y 2 de 11 en tiros de campo aquel día, supo de las antipatías de ambos jugadores de Chicago por él. Y todo tenía una explicación. El propietario de los Bulls, Jerry Reinsdorf, hizo una oferta al croata meses atrás, de 13 millones por 5 años y lo peor de todo, no llegando a un acuerdo de renovación con Scottie Pippen tras duras negociaciones a la espera de la respuesta del croata. Por aquel entonces, Pippen cobraba 700.000 dólares y Jordan no llegaba a los 3 millones de contrato. Michael lo sentenció con un “Kukoc va a ganar más dinero que Pippen y yo juntos. Me da igual lo que pueda hacer. Hay que ir a por él”. Tras el partido, Pippen declaró “yo no puedo poner a Jerry Krause a pie de cancha. Pero le voy a comprar un aparato de televisión enorme para que vea partidos como este”. El día de la final, nuevamente ante Croacia, sí que Kukoc estuvo a la altura (16 puntos, 5 rebotes y 9 asistencias), desquitándose de la frustración del primer día. Tras el partido, Magic Johnson se acercó a él expresamente y le frotó la cabeza, consciente del calvario que había pasado y del que esta vez, había salido airoso.
10.- Unas entradas para David Stern. David Stern fue una figura esencial para que se diera este milagro, impensable tres años antes, de juntar tal cantidad de estrellas NBA y formar parte de la selección estadounidense. Hubo que mover cielo y tierra, pero se logró. Stern se paseó por Barcelona durante la competición como un turista más y era tanta su discreción, que intentando adquirir entradas o pases para algunos familiares, puesto que le acompañaron más de los previstos inicialmente, no acudió a autoridades y prefirió presentarse buscando ayuda, en el set de TVE buscando a quien conocía, al corresponsal NBA de la casa, Ramón Trecet. Cuando uno de los productores de la cadena le informó que “hay un señor ahí que pregunta por ti”, Trecet, atareado en ese momento, asomó la cabeza y casi le ordenó “a ese señor, lo que quiera él”. “¿Y quién es?”. Ramón, sonriente, sabedor de la importancia de la figura de Stern, le espetó a su compañero un “ese es el presidente de los Estados Unidos”. Y volvió a sus tareas hasta que pudo atenderlo.
BARCELONA, SPAIN- AUGUST 8: Magic Johnson, NBA Commissioner David Stern and Michael Jordan pose with the Gold Medal following the game between the United States and Croatia at the 1992 Olympics on August 8 1992 at the Palau Municipal d’Esports de badalona in Barcelona, Spain. The United States defeated Croatia 117-85 to win the gold medal. NOTE TO USER: User expressly acknowledges and agrees that, by downloading and or using this photograph, User is consenting to the terms and conditions of the Getty Images License Agreement. Mandatory Copyright Notice: Copyright 1992 NBAE (Photo by Andrew D. Bernstein/NBAE via Getty Images)
También te recomendamos esta lectura sobre el Dream Team:
Sigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
