Se acabó. Veintisiete años después de su ascenso a la élite, más de media vida, Laia Palau pone fin a una trayectoria especial e irrepetible. La jugadora de Spar Girona ha anunciado en rueda de prensa que cuelga las botas y se dedicará al baloncesto formativo, aquel en el que todo empezó cuando era una niña. De esta manera, la base de Spar Girona lo deja a los 42 años con un palmarés envidiable pero, por encima de todo, con el respeto del baloncesto nacional e internacional.
«No es una sorpresa lo que estamos haciendo aquí. Dejo de jugar a baloncesto. No quiero utilizar la palabra retirada porque realmente no me retiro del baloncesto. Mi idilio con este deporte no acaba aquí. Por eso digo que dejo de jugar, y no que me retiro. Seguiré trabajando en este mundo. Este deporte ha sido mi vida, es mi vida y tiene pinta que seguirá siendo mi vida. De momento no salgo del pabellón. No vengo muy preparada. Normalmente cojo el micrófono y no me cuesta, pero hoy un poco»
A lo largo de las más de dos décadas como profesional, Laia Palau jugó con los colores de Universitari de Barcelona hasta 2004, dando paso así a su primera etapa con Bourges Basket en Francia. En 2006, dos años más tarde, la española regresaba a Ros Casares para escribir varias de las páginas más brillates de su historia. Tan solo la desaparición del club valenciano provocó su adiós, adentrándose en una viaje por todo el panorama internacional durante la última década. CCC Polkowice, USK Praha, Jayco Rangers, una segunda etapa en Bourges Basket y el Spar Girona completaban una trayectoria brillante a la par que longeva. Un camino al que pone fin con 2 Euroligas (competición en la que es la máxima asistente de la historia), 14 Ligas, 6 Supercopas y 11 Copas.
Las palabras de Laia Palau en su rueda de prensa de despedida
Laia Palau, líder de la revolución
Con la Selección, la primera de todas sus medallas llegó en Grecia, en el año 2003, con un preciado bronce en el Eurobasket. En Turquía, dos años después, la historia se repitió, justo antes de conseguir su primera plata en el Mundial del 2007. En 2009 España volvió a la tercera posición del Eurobasket con Palau entre sus filas, saltando al bronce mundial en 2010, última medalla cosechada hasta el 2013. Tras la sequía, llegó la gloria. España abrió con Laia su etapa más brillante con el oro en el Eurobasket 2013, la plata en el Mundial 2014, el bronce europeo en 2015, la plata en los JJOO de 2016, el oro en el Eurobasket del 2017, el bronce en el Campeonato del Mundo del 2018 y el oro en 2019, en el Eurobasket de Letonia y Serbia. Es decir, 7 veranos consecutivos cosechando una medalla.
Con humildad, sacrificio y entrega, se ganó el respeto de rivales y compañeras, culminando todo en los Juegos Olímpicos de 2021. Una cita posterior a su hito de 300 partidos, día en el que todo el pabellón se puso en pie, rivales (Bélgica) incluidas, para aplaudir su hazaña, pero también los valores que encarna una de las mayores leyendas gestadas por nuestro basket. Una que ahora dice adiós a las pistas.
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