Larry Bird era un tipo particular. No sólo por su altísimo nivel jugando, su capacidad de tirar, de pasar o la inteligencia que mostraba en pista. También por cómo era capaz de provocar a los rivales en cada partido. Se metía en sus cabezas y desde ahí también dominaba. Es un historión de uno de los más grandes que hayan jugado al baloncesto.
En 1986 decidió probar algo nuevo. En plena gira de los Celtics por el Oeste Bird había firmado un triple-doble en Seattle, antes de visitar Portland. Y allí se le ocurrió que él, diestro, jugaría el partido lanzando a canasta con la mano izquierda siempre que pudiera. Todas las acciones que no fuesen suspensiones… las haría con la izquierda. Quiso un reto diferente.
Y el resultado fue espectacular.
Intentó 34 tiros de campo ante Portland… y 21 de ellos fueron con la zurda. Anotó 10. Es decir Bird metió 20 puntos con la mano izquierda aquel encuentro. Se fue hasta los 47 en total (más 14 rebotes y 11 asistencias), metió la canasta que forzó la prórroga… y en el tiempo extra también anotó la canasta ganadora. Aquel duelo pasaría a ser, desde entonces, ‘The left handed game’.
Tras el encuentro, Bird confesó a un periodista del Boston Globe que se había guardado la mano derecha para el duelo ante los Lakers, que serían rivales dos días más tarde.
Espectacular.
Si quieres pasar un rato más que agradable, aquí tienes un duelo impresionante. Los Boston Celtics contra el Real Madrid a finales de la década de los ochenta. Larry Bird, Robert Parish y compañía contra un equipo blanco que compitió más que dignamente contra uno de los grandes equipos de la historia.
Sigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
