«Cabreado». Así está Jaume Ponsarnau tras su destitución como entrenador del Gipuzkoa Basket, con un balance de 0-8.
«Llevas un cabreo pensando en qué ha llevado a esta situación», explica en el programa Basket al dia de Ràdio Estel. «Hay un elemento irrevocable: llevamos ocho derrotas, con un calendario muy difícil. Hemos tenido dos partidos en casa que han sido finales y no hemos sabido competir. Ha habido mucha presión sobre el equipo, que no la ha sabido llevar y la decisión del club ha sido que el cambio era yo».
A continuación, los mejores extractos de la entrevista a Ponsarnau:
(¿Sorprendido?) «Sí. Creía que trabajábamos en una sintonía adecuada. No estábamos logrando las cosas porque los planes del verano no salían bien. Pero estábamos en el camino, sólo faltaba acabar de tocar alguna tecla para que funcionara el equipo. Lo fácil era sumar un jugador de referencia que diera tranquilidad y otros lo hicieran mejor».
(Malas condiciones de trabajo) «He estado seis meses sin cobrar. Y a pesar de eso, he logrado que el grupo tenga la máxima mentalidad para lograr lo que pueda lograr. El año pasado gestionábamos el peor presupuesto de la liga y este, el segundo peor. Esto nunca ha sido un escudo que he utilizado».
«Como entrenador no me he encontrado con el marco de trabajo adecuado”.Muchos entrenamientos sin las condiciones para que el equipo lo aproveche al máximo y tenga el tono adecuado en esta liga. Tampoco la confianza de percibir que si hay un dispendio a hacer, el entrenador valore dónde hacerlo. También los temas médicos, que han funcionado mal».
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