El curso pasado, antes de que los Nuggets se pasearan en los playoffs camino al anillo NBA, Denver tuvo un mes de marzo algo convulso. El equipo de Nikola Jokic acabó el año con récord negativo, cerrando la temporada regular con 9-10 antes de luchar por el título. Se vendió como un equipo incapaz de ganar, cuyo techo había llegado demasiado pronto, pero la realidad es que el objetivo marcado por la franquicia de Colorado estaba conseguido hacía semanas: ser primero de conferencia. Este año, por ahora, se mantienen terceros a medio partido de la cabeza, pero han dejado claro que el objetivo es el mismo que antaño, ser el #1 del Oeste. Pero no son los únicos.
Porque los Nuggets duermen terceros empezando la semana. A falta de 34 días para que acabe la temporada regular de la NBA, Denver está medio partido por detrás de Minnesota y a uno de Oklahoma, en la cabeza de la conferencia. Entre los tres, con los Clippers a tres partidos del #1, se jugarán acabar primeros. Mucho más decidido está todo en el Este, con los Celtics primeros y siete partidos y medio de diferencia con Cleveland. Boston será, salvo sorpresa mayúscula y una racha de derrotas preocupante, el mejor récord de la conferencia y de la NBA. Mientras Cavaliers y Bucks pelean por la segunda posición y tener factor pista en unas hipotéticas semifinales, los Celtics llegan al último mes con los deberes hechos. Y parece que no, pero quedar primero tiene premio.
No únicamente el hecho de jugar todas las series de playoffs como local, algo siempre atractivo teniendo en cuenta que los equipos visitantes solo han ganado un 25% de los séptimos partidos, sino por las opciones de llegar a las siguientes rondas. En la historia de la NBA, los equipos con el seed #1 de la conferencia han llegado a la final 89 ocasiones, siendo casi el 60% de los finalistas. No solo eso, es que en 62 de las 77 finales disputadas (80,52%) hasta la fecha en la NBA ha habido al menos un #1 de conferencia, representando a 51 de los campeones de la mejor liga del mundo. Ninguna otra posición ha conseguido acercarse: lo que pasa en la temporada regular se suele trasladar a los playoffs.
No solo son el sembrado que más veces ha pisado las finales, también el que mayor porcentaje de victorias tiene en ellas, con un 57,3%, y sabiendo que algunas de las derrotas son ante el #1 de la otra conferencia. Se han llevado 51 de las 62 finales donde ha habido al menos uno de los mejores equipos. Las cifras bajan a un 25% y 10% respectivamente para el segundo y tercer clasificado, por lo que la pelea entre Denver, Minnesota y Oklahoma en temporada regular puede acabar siendo clave para el desarrollo de losp playoffs. Solo dos veces en la historia un equipo por debajo del top-3 ha conseguido levantar el anillo (#4 Boston Celtics, 1969 y #6 Houston Rockets, 1995) y en total acumulan diez presencias en finales de la NBA entre los cinco combinados.
Sí que en los últimos años ha dejado de pesar tanto, especialmente en la era de LeBron James, que jugó 10 finales y solo en 2020 (Lakers), 2016 (Cleveland) y 2013 (Miami Heat) llegó como #1 de conferencia. En lo que va de siglo, 24 finales desde 2000, 12 veces el campeón ha sido el primero y las otras doce, repartidas entre el segundo y el tercero a partes iguales. Pero a la hora de llegar a la fase por el anillo, #1 y #2 tienen la misma cifra de apariciones: 18. Solo dos equipos por debajo del cuarto, Miami Heat en ambos casos. Fueron quintos en 2020, en la burbuja, y octavo el año pasado tras eliminar a Milwaukee (#1) y Boston (#2). Pocas veces se ha visto en la historia y solo el equipo de Erik Spoelstra ha podido repetir.
Miami Heat, como la presencia de Los Angeles Lakers el año pasado, coincidió con la primera vez que un equipo de play-in accedía a segunda ronda de los playoffs, con ambos llegando al menos a las finales de conferencia. La apertura de la clasificación al noveno y décimo, algo que solo ha sucedido tres veces en cinco años, y es otra guerra abierta en el Oeste. Golden State Warriors y Lakers están ahora mismo en las dos posiciones finales al play-in, necesitando dos victorias para colarse en playoffs. Por delante, Dallas y Sacramento, todavía peleando por la sexta posición, buscan evitar el desgaste físico y mental de tener que jugar un partido a vida o muerte, situación similar a Miami, Philadelphia, Indiana u Orlando en el Este. Queda un mes, algo menos de 20 partidos y mucho por decidir. Más de lo que parece.
- Compra ya nuestra revista de marzo: Patrimonio del baloncesto + Vuelta al trono
- Suscríbete a Gigantes del Basket